Como todos intuíamos, la fusión de las dos plataformas digitales ya ha recibido el visto bueno del gobierno, aunque con 34 condiciones (24 generales y 10 referidas al fútbol). El cabreo de los operadores de cable como ONO y de otros grupos mediáticos como el Grupo Correo con Telecinco a la cabeza es evidente. Los primeros por la concentración que se produce en el mercado, y los segundos por no poder meter la cabeza como proveedores de contenidos y canales como quisieran.